9 de agosto de 2009

El fútbol está de luto

A 20 días de cumplirse dos años de la trágica muerte de Antonio Puerta, el fútbol español vuelve a vestirse de luto. Dani Jarque, capitán del Espanyol, falleció ayer en la concentración de su equipo, cerca de Florencia. El jugador estaba hablando por teléfono con su novia cuando por causas desconocidas sufrió un ataque al corazón y dejó de hablar. Ella avisó a un compañero y él al delegado, que subió a la habitación del futbolista y lo encontró tirado en el suelo. Asi de cruel es el fútbol en algunas ocasiones. Un chaval de 26 años, con mucha carrera y mucha vida por delante. Deportista y buena gente, como todos sus compañeros reconocen.

Lo grave de todo esto, es que ya no se puede considerar un hecho aislado. Es un caso muy similar a los de Miklos Feher, húngaro del Benfica; Serginho, defensa central del Sao Caetano; Marc-Vivien Foé, camerunés que murió en mitad de un encuentro entre su selección y la de Colombia; y como estos, numerosos casos más.

Para colmo, las circunstancias de su muerte son muy similares a las de Antonio Puerta. El lateral izquierdo sevillista estaba en el mejor momento de su carrera, es más, se estaba haciendo un hueco en la selección española. Jarque también estaba en su mejor momento, estrenaba capitanía del Espanyol y Del Bosque ya lo tenía en cuenta en su lista de futuribles. Ambos nos dejan en el mes de agosto, en periodo de pretemporada. Y al igual que Puerta, el catalán también esperaba a un hijo.

El Hércules ya ha dado un comunicado oficial dando un sentido pésame a la familia del jugador y todos los pericos. De los integrantes de la plantilla, el más afectado ha sido Rufete, que tenía una gran relación con el central espanyolista, al haber coincidido durante los últimos tres años. "Ha sido un palo muy grande. Ha sido algo muy duro, tenía muchos vínculos con él y ha sido un palo muy grande. Hemos vivido cosas muy bonitas, estaba disfrutando de su carrera. No sabemos qué decirnos, vamos a ayudar a su familia", declaró el de Benejúzar.

A partir de ahora, el Espanyol jugará sus partidos con 12 jugadores, porque allí donde vaya, siempre estará presente Daniel Jarque. El fútbol no te olvidará. Hasta siempre Capitán.

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