30 de noviembre de 2010

¡Macho Hércules!

Victoria importantísima ante un rival directo. La cara que muestra el equipo en el Rico Pérez, gracias a Dios, es muy diferente a la que enseña a domicilio. Poco a poco los jugadores se están haciendo a la nueva categoría y están sacando puntos clave.

El domingo nos enfrentábamos dos recién ascendidos con muchas bajas. El Levante quizá un poco más perjudicado que el Hércules, pero los valencianos, con algún que otro conocido por estas tierras, no bajó los brazos en ningún momento. Quién nos iba a decir hace unos años que Xisco Nadal iba a volver al Rico Pérez, de titular en un equipo de Primera División. Además sirvió en bandeja el gol a Rubén y fue uno de los mejores jugadores visitantes. Y más de lo mismo con Rafa Jordá. El Hércules le dejó marchar en el mercado invernal hace un año, sin saber que iba a ir a un rival directo por el ascenso, pero la segunda vuelta del Levante fue espectacular, en parte, gracias a él. Menos mal que Velthuizen le sacó el empate a dos.

Hablando de Velthuizen, podemos decir que fue uno de los mejores. Por suerte, no echamos de menos a Calatayud, ¡ni a Drenthe!. Thomert en la primera parte y un magnífico Tote en la segunda hicieron olvidar al holandés por una vez. El Hércules supo llevar el peso del partido con Tiago y Abel Aguilar como pareja de mediocentros. Esta vez acertó el 'boquerón' en dar descanso a Fritzler, sin embargo no creo que en A Coruña repita.

Y el gol llegó de la mano del 'Dúo Sacapuntos', Valdez y Trézéguet. La pareja de delanteros suman 13 de los 14 goles del Hércules. Además Trézéguet siempre que ha jugado en el Rico Pérez ha marcado. Todos los goles los ha hecho como local. La asignatura pendiente tanto del francés, como del equipo, son los partidos lejos de Alicante. El próximo lunes tendrán una nueva oportunidad de resarcirse ante otro rival directo.

22 de noviembre de 2010

No Drenthe, no party

Sin Drenthe no hay fiesta. Pero no hay fiesta, no sólo cuando falta Drenthe, tenemos dependencia de muchos jugadores. El Hércules ha apostado por una plantilla en la que se puede hacer un once titular más que aceptable, pero con muchos jugadores de banquillo limitados para la categoría. No entro a discutir en si la plantilla podía ser mejor o peor, creo que cualquier herculano está satisfecho con lo que hay para mantenerse. En estos momentos, la diferencia entre titulares y suplentes es tan abismal que cuando un fijo se cae de la alineación inicial, el equipo lo nota demasiado. Y si faltan tres... pues te meten tres.

Con una banda izquierda totalmente nueva en Liga, Pulhac-Thomert, afrontó el encuentro de Cornellá-El Prat el conjunto de Esteban Vigo. Si a las bajas de Drenthe y Peña le unes la de Abraham Paz, que sigue notándose partido a partido, queda un Hércules muy mermado.

El 'boquerón' apostó por Tiago en lugar de Abel Aguilar, que venía pidiendo a gritos un partido en el banquillo. Y la verdad es que el portugués se sintió cómodo junto a Fritzler. Creo que es el único choque de la temporada en el que el Hércules ha sido muy superior en la posesión del balón. Una posesión, también hay que decirlo, baldía, mucho toque, pero poco peligro.

Fuera de casa seguimos siendo muy inocentes, cometemos errores de bulto que en Primera no se pueden hacer. Ayer convertimos un corner a nuestro favor, en un gol del Espanyol. Una contra 'perica' en la que todos los jugadores herculanos corrían y miraban el balón sin hacer una falta táctica para parar el contragolpe. Estoy de acuerdo con Esteban Vigo, en que en Primera División no puedes ensayar en los entrenamientos este tipo de jugadas, porque eso se enseña en infantiles.

Y como viene siendo habitual fuera de casa, si el rival marca primero se acaba el partido. Ayer quizá se jugó algo mejor que en Getafe o Pamplona. Al menos si tiramos alguna vez a Kameni, pero con poca puntería. El penalti y expulsión de Calatayud sentenció el encuentro, pero aún dio tiempo a que Pulhac hiciera otro penalti más.

Otro encuentro para olvidar para todos menos para un jugador, Unai Alba que debutó en Primera. Y probablemente el próximo domingo tenga su premio como titular. La otra nota positiva fue la ovación que la afición espanyolista rindió a Rufete, un jugador difícil de olvidar para ellos, al ser partícipe del mejor Espanyol de las últimas décadas.

15 de noviembre de 2010

Cinco minutos de oro

Se puso el día muy negro para los amantes de todos los deportes en Alicante. Por la mañana, el Meridiano Alicante volvía a regalar un triunfo a su rival cuando era prácticamente imposible que la victoria se escapara del Centro de Tecnificación. De ahí enganchamos con la Fórmula 1. Alonso tenía todo de cara para proclamarse campeón, pero la estrategia de Ferrari tiró toda una temporada por la borda. Y con ese panorama nos plantamos en el Rico Pérez a las 17:00.

La alineación volvía a ilusionarnos tras la decepción de la Copa. Volvían a la alineación el dúo letal, Valdez y Trézéguet, autores de todos los goles hasta este encuentro. Con Drenthe y Kiko en las alas y Fritzler y Abel Aguilar en el centro del campo. Además volvía también Cortés, al que se le echó de menos en los dos últimos partidos.

Todo aquel que pensara que el equipo iba a salir enrabietado por la eliminación copera se iba a llevar otro disgusto. Una primera parte para olvidar, en la que Lasarte le dio un repaso táctico al 'boquerón'. La Real Sociedad se adelantó a balón parado (y van ya...) gracias a Griezmann, un chaval de 19 años que ya es la estrella del conjunto 'Txuri Urdin'. Poco más tarde, de nuevo Griezmann, mandó un balón al larguero en un buen remate con la cabeza. El Hércules era incapaz de triangular cuando pasaba de su campo y la Real seguía a lo suyo. Presionando cuando debía y ahogando la salida de balón blanquiazul que no veía soluciones. Ni los centrales, ni Fritzler eran capaces de conectar con algún atacante.

Al término de los primeros 45 minutos el Rico Pérez despidió a los suyos con pitos. Los primeros silbidos de la temporada. Cristian, Tote y Portillo calentaban a mayor ritmo que el resto y todo hacía indicar que Esteban Vigo iba a buscar alternativas en el banquillo. Sin embargo, optó por esperar un poco a ver como transcurría el inicio del segundo tiempo y mejor no puedieron salir las cosas.

El gol de Trézéguet en el primer minuto cambió toda la decoración. Genial pase de Fritzler a Kiko al hueco y asistencia del de Sanet y Negrals, para que 'Le Roi' David anotara el sexto en su cuenta. El Rico Pérez despertó, cambió los pitos por aplausos y empezó a alentar al equipo. La Real entró en un estado de nervios y dudas que no le habíamos visto en toda la primera parte. Y cinco minutos después, una falta provocada por Kiko, la mandó Drenthe al fondo de la red por toda la escuadra. Increíbles cinco minutos que valieron para llevarse tres puntos de oro.

A partir de ahí, los dos equipos se cambiaron los papeles de la primera mitad. El Hércules esperó agazapado, con las líneas muy juntitas a la Real que cada vez veía menos espacios. Lasarte lo intentó con Tamudo, en el estadio donde debutó y marcó su primer gol. En los locales volvió a jugar Tote, que corrío y trabajó casi más que en toda su carrera. Con esa actitud no tardará en volver al once.

Los minutos fueron transcurriendo sin demasiados sobresaltos. Dominando la Real y los alicantinos saliendo rápido a la contra. Aunque el marcador ya no se iba a mover. Victoria que sirve para dejar los puestos de descenso a tres puntos. Como dijo Trézéguet tras el encuentro ahora toca mejorar como visitantes.

13 de noviembre de 2010

Descalabro en el último minuto

Con un par de días de retraso y sin prácticamente tiempo para comentarlo, actualizo el blog con la derrota copera. Una Copa del Rey para olvidar, con dos goles regalados en apenas 15 minutos. Muchos de los suplentes sacaron la garra suficiente para aferrarse a esta competición. Nada que reprochar a los Cristian, Pulhac, Portillo o Thomert entre otros. Pero la expulsión de Abel Aguilar, que aún no ha cogido el tono adecuado para marcar diferencias en el centro del campo, volvió a poner cuesta arriba la eliminatoria.

Los blanquiazules se defendieron con uñas y dientes hasta que en el '90 llegó el golpe definitivo del Málaga. Eliminados y sin tiempo que perder, toca pensar en la Liga. Mañana llega la Real que jamás ganó en Alicante. El Rico Pérez debe convertirse en un fortín.

9 de noviembre de 2010

Sin actitud

Pésimo partido realizado ayer por el conjunto de Esteban Vigo. En ningún momento dio sensación de peligro, ni siquiera de controlar el encuentro. El Reyno de Navarra no era una plaza fácil, pero lo peor fue la imagen dada en Pamplona. Si quieres mantenerte en Primera División no puedes encajar tres goles a balón parado ante un rival directo. Por lo visto este domingo la actitud de los jugadores debió quedarse en Alicante.

Volvió a jugar Drenthe, que a mi juicio fue de lo poco salvable, sin embargo no pudimos contar con Valdez, debido al esguince que se hizo ante el Real Madrid. Y cuando el león paraguayo no está lo notamos mucho, especialmente fuera de casa, que solemos jugar a la contra. También salió de inicio Kiko, que por el momento parece un jugador mejor cuando sale de revulsivo, aunque este tipo de partidos le harán crecer como futbolista. Por otro lado, el trivote Fritzler, Abel y Tiago ha sido muy efectivo ante los grandes, pero contra los de nuestra Liga parece no funcionar demasiado bien.

Esteban Vigo avisó en Getafe después de perder 3-0, "si no jugamos al 110% pasan estas cosas". Esta vez el Hércules no jugó ni al 50% y pasó lo que pasó. El partido se puede resumir en la jugada del primer gol. Pase suicida de Peña a Calatayud, que no tiene más remedio que desviarla con la mano para evitar un golazo en propia puerta. Cesión y libre indirecto a 10 metros de la portería. Chuta Monreal y el balón pasa entre las piernas de un jugador de la barrera.

A partir de ahí coser y cantar para el equipo rojillo. Aunque el colegiado también ayudó lo suyo. Se ha quejado mucho Camacho en lo que llevamos de Liga de los arbitrajes sufridos pero el domingo no dijo ni mu del colegiado. Con 1-0, un jugador de Osasuna barre el balón con la mano cuando Trézéguet se disponía a disparar dentro del área. En la jugada siguiente se inventa una falta, que en realidad fue un piscinazo de Soriano y los locales lo aprovecharon para marcar el segundo. Dos jugadas claves que sirvieron para matar el partido y rematar al Hércules.

7 de noviembre de 2010

Partido 600 en Primera División

1 de noviembre de 2010

El Hércules dio la cara

La alegría llegó muy pronto, demasiado pronto. Y el partido se hizo largo, eterno. A los dos minutos Trézéguet ya había batido la meta Casillas, una de las porterías preferidas por el francés. Cuatro goles le ha metido el ex-juventino al conjunto merengue. Por delante quedaban 88 minutos para defender la renta y sacar algo positivo ante el Real Madrid.

La muralla herculana aguantó firme la primera mitad. Cortés se desdoblaba parando a Cristiano Ronaldo en defensa y buscando la espalda a Marcelo en ataque. De sus botas nació un medido centro que 'Le Roi' David remató a la escuadra de Casillas. Espectacular remate del pichichi blanquiazul, que hacía soñar a las 30.000 personas que llenaban el Rico Pérez.

No entraba en los planes del conjunto blanco encajar ese gol tan tempranero. Y el Hércules se creció. Özil, Khedira y Xabi Alonso naufragaban ante Fritzler y Abel Aguilar, que en defensa siempre contaban con la inestimable ayuda de Thomert, Tiago Gomes y Valdez. Rodríguez hacía olvidar a Abraham Paz, Pamarot estuvo infranqueable, mientras que Cortés y Peña tapaban las internadas de Di María y Cristiano Ronaldo.

Un engranaje perfecto que parecía difícil mantener en la segunda parte. El Madrid tenía que despertar, no se podía permitir dejarse el liderato en Alicante en vísperas del derbi madrileño. En el descanso, las paredes del vestuario visitante del Rico Pérez, debieron revivir aquella arenga que Capello recitó a los suyos en la temporada 96-97. El Hércules ganaba y bien. Hacía mucho daño a la contra. Trézéguet y Valdez se comieron a Pepe. Y Mourinho contemplaba atónito desde el banquillo como los alicantinos eran superiores en el terreno de juego.

Tras la reanudación la lesión de Thomert trastocó los planes. El espigado extremo izquierdo estaba cuajando sus mejores minutos desde que está en el Hércules. Por él entró Sendoa, que estuvo muy impreciso y fallón. Y en ese momentó resucitó Cristiano. Laguitazo desde 30 metros que Calatayud no acierta a blocar y Di María aprovechó para anotar el empate.

A partir de ahí, Esteban Vigo prefirió asegurar el empate que seguir haciéndole daño a los blancos como en el primer tiempo. El segundo cambio, Rufete por Trézéguet, hizo que el Madrid creciera más aún. Mourinho respondió al boquerón quitando a un central por un delantero, Benzema sustituyó a Pepe. El reloj seguía pasando lentamente.

El Hércules era incapaz de pasar de medio campo y los vitantes dominaban claramente. El esfuerzo realizado durante los primeros 45 minutos empezó a notarse y el cansancio era evidente. Y tanto fue el cántaro a la fuente que al final tenía que romperse. Cristiano enmudeció al Rico Pérez dando la vuelta al marcador en el minuto 81.

Y Mourinho volvió a mover ficha, el viento soplaba a favor y tenía que cerrar el partido. Arbeloa y Albiol, entraron por Higuaín y Özil. Cristiano a lo suyo, sentenciaba en el '85. Y cerca estuvo de marcar uno de los hat-tricks más rápidos de la historia del fútbol si en el '88 no hubiese mandado a las nubes un balón a portería vacía, tras regatear a Calatayud. Demasiado Ronaldo para un Hércules muy cansado.

Foto: Información.es